En los últimos minutos de mi primera visita, tuve la oportunidad de hablar con una maestra de la escuela Virgen del Mar, quien amablemente me propuso volver para hacer la presentación de Memshu a una clase de 14 alumnos de entre 8 y 10 años. Acepté con gusto.
Durante esta segunda visita, pude presentar los juegos de las categorías de frutas y animales. Me presenté a la clase, explicando que soy francés y que viví varios años en Londres antes de venir a España. Algunos niños compartieron conmigo anécdotas de sus viajes a Londres, mientras que otros me contaron que sus hermanos mayores habían visitado recientemente la capital inglesa en un viaje organizado por la escuela. Para finalizar esta introducción, presenté a la mascota de Memshu. Durante esta hora, estuvieron presentes dos maestras. Estoy agradecido con ellas por facilitar la organización de los grupos y el desarrollo de la actividad.
Comenzamos creando 4 grupos de 3 a 4 niños para darles a cada uno un tiempo óptimo de juego. Luego, expliqué las reglas del juego a la clase. Empezamos con el español. Algunos grupos eran más rápidos que otros. Luego jugamos en inglés. Finalmente, jugamos con el inglés y el español al mismo tiempo. Durante este tiempo de juego, los niños se divirtieron mucho practicando el inglés. Algunos venían frecuentemente hacia mí para compartir sus logros al encontrar las cartas relacionadas. Al final de la hora, hicimos una encuesta informal. Los niños levantaron la mano para decir si les había gustado jugar Memshu. ¡A 11 de los 14 niños les encantó!
Por propia iniciativa, decidí de aprender el inglés durante 2 años, en simultáneo con mi trabajo de programador.
Eso me permitió de encontrar un trabajo en Londres, Inglaterra, donde viví durante 5 años.
Ahora, vivo en España. Cuando llegué, sólo conocía expresiones básicas para comunicarme. Aunado a esto, quise mantener mi vocabulario en inglés. Fue así que comencé el viaje de Memshu.
